Artículo: Presentamos Bosquearbol – Un Nuevo Capítulo en Nuestra Historia Creativa

Presentamos Bosquearbol – Un Nuevo Capítulo en Nuestra Historia Creativa
Algo nuevo ha llegado a Kittyvancoesant… y, sin embargo, de algún modo, ha estado aquí desde siempre.

Bosquearbol nació de toda una vida de creatividad compartida entre Benjamin y yo.
Antes de ser pareja en la vida, fuimos creadores: siempre dibujando, modelando, pintando, cosiendo. Desde 1996, la creatividad ha sido el lenguaje entre nosotros. Nos guió durante nuestros años en tiendas de moda de alta gama en Ámsterdam y, con el tiempo, nos trajo hasta aquí, a Andalucía, donde ahora volvemos a trabajar codo con codo.
Hoy, ese ritmo compartido se convierte en Bosquearbol: una línea cápsula diseñada y creada por mi marido Benjamin y por mí, que ahora tiene su propio espacio en nuestra web.
¿Qué es Bosquearbol?
Una mezcla de estructura militar en bruto y libertad femenina.
Cada prenda comienza como una pieza vintage — una chaqueta, unos vaqueros, una sudadera o una camiseta — y se transforma en una pieza irrepetible.
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Benjamin reconstruye y borda a mano.
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Pinto, tiño y doy forma a la tela a mano.
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Juntos, convertimos vidas pasadas en nuevas historias.
Pintado a mano. Cosido a mano. Sin trabajo de fábrica. Sin repetición.
Solo artesanía lenta, creada en nuestro estudio en Andalucía.

¿Por qué aquí? ¿Por qué ahora?
Mientras Kittyvan Coesant habita el mundo del punto suave, Bosquearbol aporta contraste: bordes toscos, colores intensos, influencias tribales, toques de cachemira, rayas deportivas, energía motera y texturas de ejército vintage.
Dos mundos distintos — que comparten un mismo hogar de creatividad.
Creado por Dos Manos – Construido sobre Una Visión Compartida
Bosquearbol no se construye sobre una estrategia.
Es una conversación entre el pincel y la aguja.
Entre lo masculino y lo femenino.
Entre el pasado y la posibilidad.
Y ahora, estamos listos para compartirlo contigo.

Las primeras piezas de Bosquearbol ya están disponibles en una nueva pestaña del menú.
Cada prenda es única — pensada para ser llevada, vivida y heredada.